NAYARIT: ENTRE LA CRISIS POLITICA NACIONAL Y LA ESPERANZA DEL NUEVO EJECUTIVO.

Las condiciones actuales del país no son satisfactorias. En el transcurso de la última década los problemas nacionales se han agudizado. Hemos sido testigos del surgimiento de nuevos flagelos que afectan a la sociedad lo que la hace transcurrir entre un sentimiento de incertidumbre y desesperanza. El Gobierno de la República ha perdido rumbo y de esta circunstancia ha resultado un acentuado deterioro institucional, crecimiento de la Inseguridad, estancamiento Económico, Desempleo y una profunda Desigualdad Social. Las Estadísticas que arrojan a la fecha diversos estudios oficiales no son alentadoras, el país mantiene una constante de estancamiento en diversos rubros, lo que evidencia el fracaso del gobierno federal en turno.

Según datos del BANCO DE MÉXICO, en los últimos 9 años el Crecimiento promedio del Producto Interno Bruto (la medida agregada que expresa el valor monetario de la producción de bienes y servicios finales de un país durante un período de tiempo) ha sido de 1.2 % por ciento, mientras que para el periodo 1994-2000 el promedio del Crecimiento fue del 3.6 % por ciento aún con la crisis de 1995 y la caída del precio del petróleo en 1998.

En el rubro del Empleo, para octubre de 2010, la tasa de desempleo abierto aumentó a 5.70 % por ciento, y en ese mismo mes perdieron su empleo 66 mil personas. Actualmente según datos del INEGI de una Población Económicamente Activa formada por 47 millones de personas, sólo 15 millones tienen empleo formal y en los dos últimos años ha aumentado la proporción de empleos eventuales, los que trabajan menos de 15 horas a la semana y los que perciben ingresos de alrededor de dos salarios mínimos.

De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) la distribución de la Población Mexicana en 2008 por situación de vulnerabilidad social es la siguiente: el 19.4 millones de personas se mantiene sin carencias y con adecuado nivel de bienestar, 36 millones de personas viven en la pobreza, 11.2 millones de personas en pobreza extrema, 35.2 millones de personas son vulnerables por carencia social y 4.8 millones vulnerables por ingreso. Estas cifras contrastan con el aumento en el gasto en Desarrollo Social del Gobierno Federal que fue de un 38.5 %.

Según el mismo estudio para 2008 había en el país 50.6 millones de mexicanos que no contaban con un ingreso suficiente para cubrir sus necesidades básicas. Según el propio CONEVAL, la Canasta Básica Alimentaria en los últimos 10 años ha sufrido un aumento del 68 % pasando de un precio de 641 pesos en el año 2000 a 1,075 pesos para el año 2010. El Gas LP para ese mismo periodo ha sufrido un aumento del 86 % en tanto que el Diesel de 103 por ciento.

Según el Banco de México en el documento MIGRATION AND REMITTANCES 2011 (Migraciones y sus Remesas) México fue en 2010 el país con mayor migración a nivel mundial por encima de la India, Rusia y China al registrar 11 millones 900 mil connacionales que salieron de país en busca de mejorar sus condiciones de vida es decir el 10.7 por ciento de la población total.

En el Sector Educación México vive también una desgracia: de cada 100 alumnos que ingresan a primaria, solamente 13 logran terminar la Educación Superior. Según datos de la OCDE, la población mayor de 24 años con bachillerato terminado es del 30 %; mientras que el promedio en los países miembros es del 70 %. Las cifras del INEGI muestran que de los 27 millones de jóvenes, solo una cuarta parte asiste a las escuelas de educación media y superior, y de ellos, apenas el 24 % completa el ciclo, sin que eso sea garantía laboral ya que el 67 % de los egresados desempeñan actividades ajenas a su profesión. Según el informe de la Auditoria Superior de la Federación, México se ubica en la lista de naciones con “más bajo desempeño en el sector educativo” junto con países como el Congo, ocupando el lugar 31 de 134 en el gasto de educación y el lugar 127 en calidad educativa. En investigación y desarrollo científico registra el menor número de patentes y aparecemos en el último lugar entre los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos).

En materia de Seguridad Publica México se ha convertido en un país altamente inseguro lo que inhibe la inversión y propicia la inestabilidad política; en lo que va del sexenio se han registrado un total de 33 mil 797 muertes por causa de enfrentamientos entre bandas rivales del crimen organizado, esto según el portal UNIVISIÓN NOTICIAS. COM, ya que a la fecha no es posible obtener una fuente oficial única. El aumento en el presupuesto no refleja una mejora en este rubro ni tampoco a contenido la violencia, en 2001 el presupuesto destinado a la Secretaria de Seguridad Publica era de 6 mil millones de pesos anuales, mientras que para 2010 haciende a poco más de 35 mil millones de pesos lo que representa un aumento del 500 % en 9 años. En México cada 24 horas se realizan 900 secuestros exprés, solo se denuncia 1 de cada 600 y se castiga a 1 de cada 300. El índice de violencia ha sido exponencial; el aumento en robo de autos, robos bancarios y robos a casa habitación aumentaron en un 200 % en los últimos 10 años. La participación de jóvenes y adolescentes en los delitos aumentó, el 78% de los Delitos cometidos son jóvenes de entre 14 y 21 años. Según Consulta Mitofsky el 59 % de los ciudadanos piensan que la estrategia contra el narcotráfico ha sido un fracaso, 83 % que el país es más inseguro que el año pasado y el 62 % percibe que su Estado, municipio o ciudad es insegura y que los delitos aumentaron.

Esta es una somera radiografía del México actual, la de un país que pareciera haber perdido el rumbo y que se adentra hacia el futuro sin el diseño de un proyecto nacional a la altura de las exigencias de los mexicanos. La inseguridad, el estancamiento económico, el desempleo y la desigualdad social han sido el signo característico de la primera década del México del siglo XXI.

Bajo este escenario nacional que impacta directamente la realidad de Nayarit, el nuevo ejecutivo local que encabezará ROBERTO SANDOVAL CASTAÑEDA habrá de enfrentar un escenario con una buena cantidad de retos, sobre todo en los rubros de Seguridad Pública, Finanzas, Educación Básica, Campo, Salud y finalmente, un tema pendiente desde hace muchos años: el de la pobreza y la desigualdad social, por lo que la activación de una política social tendrá que ser inevitable.

Es sin duda, un gran reto el que asumirá el nuevo Ejecutivo Estatal sobre todo porque las necesidades de los Nayaritas se han venido transformando y son otras a las que tradicionalmente los gobiernos habían venido enfrentando, en este sentido muchos requerimientos son inéditos y se pondrá a prueba la capacidad de innovación y calidad de los servidores públicos.

Nayarit y México se encuentran en una situación crítica, sin embargo, no todo es fatalismos y datos adversos, con la llegada del nuevo ejecutivo se abren nuevas esperanzas, el final de un ciclo y el inicio de un nuevo capítulo en la historia de Nayarit están por empezar, coincido junto con muchos otros que este nuevo ciclo habrá de caracterizarse por la cohesión ciudadana, la unión de todas las fuerzas políticas y sociales, la transparencia y el combate real a la problemática Estatal. Estamos ante la temporada en que el escepticismo por la política desaparece y renovamos nuestras esperanzas. Todos los ciudadanos, junto con el nuevo ejecutivo somos corresponsables de lo que ocurra con nuestro Estado. La invitación es a renovar las esperanzas, y a aportar todo nuestro esfuerzo, Nayarit también es México y como lo citara el comandante Ernesto “El Che Guevara”, “SEAMOS REALISTAS Y HAGAMOS LO IMPOSIBLE”